Convivimos todos los días con nuestro cuerpo. Nos son familiares todos los procesos que desarrolla, las funciones que puede hacer, lo que siente ante los estímulos… Pero quizás no conozcas algunos detalles interesantes, que te contaremos aquí.
La tos
Cuando nuestro cuerpo necesita expulsar algo de las vías respiratorias, recurre a la tos. Este es un movimiento espasmódico repentino (y, en ocasiones, repetitivo) de la caja torácica, que produce la exhalación violenta de aire, lo que suele expulsar lo que sea que obstruye nuestras vías respiratorias.
La velocidad que puede alcanzar el aire exhalado llega a los 140 Km. por hora, la velocidad que tomaría un buen automóvil en una autopista despejada.
El estornudo
Es básicamente lo mismo que la tos, pero muchísimo más violento. Suelen producirse por la irritación de la mucosa nasal por parte de algún componente, como polvo o alérgenos. El aire sale de los pulmones a una velocidad aún más asombrosa: 965 Km. por hora. Prácticamente la velocidad de un avión.
La estatura cambia durante el día
Somos más altos al levantarnos, por la mañana, que al acostarnos, por la noche. Durante el día, los discos intervertebrales se van acomodando, y podemos llegar a ser de 0,5 a 1,5 cm. más bajos que cuando despertamos. Las cosas vuelven a la normalidad después de relajarnos durmiendo.
Un mar de lágrimas
Nuestro cuerpo produce lágrimas durante toda la vida. No sólo cuando lloramos, sino con la finalidad de mantener lubricado al ojo y librarlo de objetos extraños. Durante toda su vida una persona produce unos 65 litros de lágrimas, algo así como 1.850.000 lágrimas.
El cerebro no duele… ¡la cabeza sí!
Cuando nos duele la cabeza, el cerebro nos avisa de ese dolor, pero no es el que lo siente. No hay células que permitan transmitir dolor del cerebro. Es una masa inerte, sin movimiento alguno, que no siente dolor. Pero nos comunica cuando nos duele otra parte del cuerpo.
Somos grandes productores de calor
¿Te has puesto a pensar porqué al abrigarte dejas de sentir frío? Es porque el abrigo impide que el calor producido por tu cuerpo se pierda en el ambiente, y hace que ese calor lo sientas sobre tu piel. Y el calor que produce una persona es una cantidad nada despreciable. En 30 minutos alcanzaría para poner a hervir 4 litros de agua.
Los pulmones
Tenemos dos pulmones, pero el derecho es algo más grande que el izquierdo, debido a que este debe dejar lugar en la caja torácica para el corazón.
Las células
Cada tejido del cuerpo humano está compuesto por distintos tipos de células. Estas tienen diferentes características, de acuerdo a la función del órgano que componen. Entre esas diferencias, una muy importante es la del tamaño. La célula más grande en un cuerpo humano son los óvulos de las mujeres. Y las más pequeñas son los espermatozoides, en los hombres. ¡Y todos comenzamos a vivir a partir de la unión de la célula más pequeña con la más grande!