Desde mi adolescencia, he sufrido de psoriasis, lo cual me ha parecido un problema cada vez que se manifiesta en mi piel. Esta enfermedad cada vez que llevaba sol, que me estresaba o que tenía una mala noche, se activaba en mí, manifestándose por una horribles rosetas en mi piel que parecen escamas y son en lo absoluto agradables tanto para el que las ve como para quien las tiene.
A pesar de que solo se trata de un problema de piel, sufrir de psoriasis me hizo tener problemas en mi vida cotidiana, tanto que me sentía una chica muy desafortunada por tener que lidiar con una enfermedad con esa, que nada tiene que ver con la estética. Cada vez que veía que la piel se me inflamaba, dejaba de asistir al colegio y a las reuniones con amigos, porque me acomplejaba mucho que la gente pudiera ver lo que tenía y le pareciera desagradable.
Aunque yo no tenía la culpa de sufrir de psoriasis, la gente no entendería y era algo que me atormentaba. Me daba temor si alguien se me quedaba viendo fijamente alguna parte de mi cuerpo, porque enseguida pensaba que podría deberse a que algún indicio de psoriasis había aparecido en mi piel sin haberme dado cuenta. Era muy incómodo vivir así, me sentía muy mal, muy insegura y bastante frustrada de tener que dejar de disfrutar de muchas cosas porque debía cuidarme y esperar que la inflamación de mi piel bajara para que las marcas o escamas de mi piel desaparecieran.
Todo esto, desde luego, que me hizo ser más y más cuidadosa cuando me tocaba salir a fiestas y posar para fotografías, pues debía procurar que mi ropa y cabello disimularan cualquier señal de psoriasis, ya que, con la proliferación de las cosas a través de las redes sociales, mi enfermedad no sería la excepción para ser difundida rápidamente entre amigos y familiares no tan cercanos.
Para salir a cualquier lugar, también era un problema para mí el hecho de tener que hacer todo lo más rápido posible, de manera que salía sumamente abrigada, procurando protegerme. Pero cuando llegaba el verano, debía ingeniármelas de todas las formas posibles para que mis escamas no se vieran. Era siempre todo un total estrés. Cada vez que salía con mis amigos me sentía aterrada de que se me viera un poco la marca del psoriasis y lo peor de todo es que estar bajo esa situación empeoraba mi situación.
Buscando por internet alguna solución para disimular la psoriasis o eliminarla por completo, conocí algo llamado Basta de psoriasis, un método sumamente efectivo que en menos de 60 días hizo que la enfermedad se fuera completamente de mi cuerpo. Hoy vivo sin temores para mostrar mi piel. Me siento muy feliz.
Si tú también quieres superar la psoriasis para siempre, Haz Click Aquí
